San Pedro de Verona, también conocido como San Pedro Mártir, es un santo reconocido en la Iglesia Católica y venerado por muchas personas por su firme defensa de la fe. A lo largo de la historia, su figura ha sido objeto de diversas interpretaciones dentro de la Iglesia, y una de las más recientes ha sido su relación con la película "Ruega por nosotros".
San Pedro vs el demonio.
El Demonio es muy astuto y hace hasta lo imposible para engañar a los hijos de Dios. En una ocasión hasta tuvo la osadía de disfrazarse de la Virgen María pero no contaba con la sabiduría de un gran santo quien lo puso al descubierto gracias a la Santa Eucaristía.
A mediados del siglo XI surgió la herejía albigense. Muchos católicos fueron engañados por esta creencia que postulaba que Dios había creado el mundo espiritual mientras que el Diablo había creado el mundo material. En este contexto surgió San Pedro de Verona, un religioso dominico que luchó contra esta herejía como miembro del Tribunal del Santo Oficio.
Se cuenta que un día un grupo de albigenses visitó a San Pedro de Verona asegurándole que la Santísima Virgen María con el Niño Jesús en sus brazos se había aparecido ante ellos mientras oraban en una de sus reuniones. Al santo dominico esta noticia no le parecía nada razonable así que les prometió que los acompañaría a una de sus reuniones.
La visita se concretó y una vez más la supuesta aparición se volvió a dar ante el grupo de herejes y San Pedro de Verona. Sin embargo, gracias a su fe, el santo dominico pudo distinguir que ambas figuras parecían tener unos pequeños cuernos sobre sus cabezas.
Sin pensarlo dos veces, San Pedro tomó en sus manos una hostia que él mismo había consagrado, la elevó e increpó a a falsa aparición diciendo «si eres la Madre de Dios, adora aquí a tu hijo«. En ese mismo momento el demonio huyó del lugar y todos los herejes allí reunidos volvieron a la fe católica.
Esta anécdota nos recuerda a aquella dura advertencia que San Pablo le hizo a los Gálatas: «Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema».
La visita se concretó y una vez más la supuesta aparición se volvió a dar ante el grupo de herejes y San Pedro de Verona. Sin embargo, gracias a su fe, el santo dominico pudo distinguir que ambas figuras parecían tener unos pequeños cuernos sobre sus cabezas.
Sin pensarlo dos veces, San Pedro tomó en sus manos una hostia que él mismo había consagrado, la elevó e increpó a a falsa aparición diciendo «si eres la Madre de Dios, adora aquí a tu hijo«. En ese mismo momento el demonio huyó del lugar y todos los herejes allí reunidos volvieron a la fe católica.
Esta anécdota nos recuerda a aquella dura advertencia que San Pablo le hizo a los Gálatas: «Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema».
Polémica de Maria
Desde la perspectiva católico-mariana, el papel de la virgen María (Sobretodo en su advocacion de "Guadalupe", según lo descrito por Juan) en el apocalipsis es el de intercesora y protectora de los fieles. Se cree que en los tiempos finales, ella tendrá un papel fundamental en la protección y salvación de la humanidad, y que gracias a su intercesión, muchos serán salvados. Este rol ha sido representado en muchas obras de arte católicas, donde se ve a la Virgen María rodeada de ángeles y llevando a cabo diversas acciones para proteger a los fieles.
Sin embargo, también existe una minoría de grupos cristianos que ven a la Virgen María como un ente maligno que usurpa el rol que corresponde a Dios. Para estos grupos, cualquier adoración o veneración que se le rinda a María es vista como una falta de respeto al verdadero Dios, y se considera un pecado. Además, algunos de estos grupos han llegado incluso a afirmar que la Virgen María es la representación de la "Gran Ramera" mencionada en el libro del Apocalipsis, que seduce a los fieles y los lleva hacia el pecado.
Este debate se retoma en la cinta puesto que se trata de un demonio haciéndose pasar por María.
Conclusión
En general, la figura de San Pedro de Verona sigue siendo una de las más veneradas en la Iglesia Católica, y su herencia ha sido inmortalizada en obras de arte y obras de teatro. Si bien su relación con la película "Ruega por nosotros" ha sido objeto de debate, es importante recordar que la fe es un tema personal y que cada persona tiene derecho a creer en lo que mejor le parezca.